Cómo disfrutar del sexo a partir de los 50
Mitos sobre el sexo a partir de los 50 años. Una creencia extendida en la sociedad es que hombres y mujeres, al sobrepasar los 50 años, no están interesados en el sexo, pierden deseo o no tienen capacidad para el mismo. Nada más lejos de la realidad. SALUD GETTY IMAGES / WUNDERVISUALS
Con la edad tendemos a pensar que el deseo sexual desaparece a medida que nos hacemos mayores, pero hay mucho mito en este sentido. Es cierto que puede cambiar el ritmo, la forma o las prioridades, pero lo cierto es que desaparecer, no desaparece. Además, a partir de los 40-50 el sexo se convierte en algo imprescindible para la salud. Te contamos cómo potenciar tus relaciones.

Como todo, la sexualidad también evoluciona con la edad. No es lo mismo tener sexo en la adolescencia que en la edad adulta y tampoco lo es con 30 que con 50 años. Esto no quiere decir que a medida que cumplamos años, las ganas de sexo disminuyan o aumentan, simplemente cambia la forma en la que vivimos y disfrutamos de las relaciones sexuales.
En el caso de la mujer, es cierto que, a determinada edad y por el efecto de las hormonas, puede disminuir la líbido y que las ganas de tener sexo disminuyan pero esto se puede revertir. Como explica a CuídatePlus Alba Povedano, sexóloga clínica y encargada de Amantis Gràcia (Barcelona), “la sexualidad evoluciona a lo largo de nuestra vida”. Con la edad, explica, “tendemos a pensar que desaparece a medida que nos hacemos mayores, pero hay mucho mito en cuanto a esa afirmación. Sí que puede cambiar el ritmo, la forma o las prioridades, pero lo cierto es que desaparecer, no desaparece”.
Mientras que en la juventud “predomina mucho más la intensidad, la frecuencia o incluso la curiosidad, con la edad se gana terreno a la calidad de las relaciones, así como la conexión entre las personas, mejor comunicación y más disfrute sin prisas”, informa. Eso sí, “vamos a experimentar cambios en el cuerpo y habrá que ir adaptándose a ellos”.

Diferencias entre el hombre y la mujer
En cuanto a las diferencias entre hombres y mujeres, a nivel biológico y lejos de lo que pudiéramos pensar, la experta señala que “no hay tantas diferencias entre unos y otros”. Lo que sí hay son “cambios educacionales”. Esto es así porque “a los hombres se les ha educado mucho más en el rendimiento y en la disposición y a las mujeres mucho más en el cuidado y en la complacencia”.
En el plano fisiológico, a medida que nos hacemos mayores, los hombres van a experimentar ciertos cambios, sobre todo, “en las erecciones y en tener menos deseo por causas hormonales cuando baja la testosterona”. En el caso de las mujeres, aumenta “la sequedad vaginal, se producen cambios en la sensibilidad y atrofias si no hay buenos cuidados”. Esto es lo normal, sin embargo, si juntamos los cambios educacionales con estos cambios fisiológicos, “aparece la frustración por no llegar a esos estándares que teníamos establecidos” y aquí es cuando aparecen los problemas. La buena noticia es que, todo se puede arreglar con “una mejor comunicación, exploración y autoconocimiento”. Esto, señala la sexóloga, “puede hacer que la conexión sea mayor que cuando pasamos etapas siendo más jóvenes”.
Los gustos también cambian
Pero no sólo se producen cambios físicos a partir de los 50, sino que también cambian los gustos. De jóvenes, explica la sexóloga, “nos suelen gustar más las prácticas inmediatas o muchas que se asocian a lo visual, mientras que, con el tiempo, valoramos más la parte más emocional y sensorial”. Algo que ocurre tanto en hombres como en mujeres.
En la juventud, describe, “solemos darle aún demasiada importancia a los genitales y pasamos por los preliminares como si fueran solo una parte menor del juego sexual, mientras que, en la madurez, estas prácticas tan divertidas pasan a ser mucho más el centro de la relación, dando mucha más importancia al contacto, el ritmo más lento, y el placer compartido sin tanta autoexigencia, dejando de ser tan genital y pasando a ser una sexualidad más integral, de piel, miradas, complicidad, etc.”
Pero no sólo eso, ya que en edades más avanzadas, “muchas personas mayores suelen atreverse a hacer cosas nuevas porque ya no sienten tanta vergüenza o miedo al qué dirán”.
Beneficios del sexo
Entre los múltiples beneficios del sexo a cualquier edad pero, sobre todo, a partir de los 50, reduce estos niveles de cortisol y funciona como un catalizador que estimula la liberación de diferentes sustancias implicadas en nuestro bienestar, como las endorfinas, que producen sensaciones de euforia y placer, la oxitocina que promueve sentimientos de conexión y confianza, o la dopamina que mejora el estado de ánimo y la motivación.
Consejos para disfrutar del sexo a partir de los 50
Para los que quieran mejorar sus relaciones sexuales en la edad adulta, su consejo de experta es cuidar todos los ámbitos, no sólo el físico.
Sus recomendaciones son:
- Cuidar la salud física, porque influye en el deseo.
- Comunicar. Hablar de lo que gusta, de lo que no y de lo que se necesita, y no dar por hecho que lo que me gustaba hace unos años sigue siendo lo mismo que ahora. Hay que tener presente que el cuerpo y las preferencias cambian.
- Explorar el cuerpo sin prisa, con humor y sin autoexigencia. Siempre tenemos nuevos recovecos por conocer y el cuerpo es una fuente de placer que no acabaríamos nunca.
- Usar lubricantes o juguetes que nos pueden ayudar a recuperar fuerza, tonicidad de suelo pélvico para disfrutar más, ayudar con la parte más fisiológica, y además pasar un buen rato cambiando un poco el tipo de estímulo al que estamos acostumbrados/as.
- Mantener el deseo con estímulos: leer, fantasear, tocarse, descubrirse con los juguetes ya nombrados.
Fuente: cuidateplus