Qué pasa si comes avena todos los días

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dLa avena se ha convertido en uno de los cereales más consumidos en España, sobre todo, entre la gente que busca cuidar su salud ¿por qué? Te contamos qué efectos produce en el cuerpo comer avena todos los días. A

avena
  1. Joanna Guillén Valera

Entre la gran variedad de cereales que podemos encontrar en las estanterías de los supermercados, la avena se ha convertido en uno de los más populares, sobre todo, entre los que buscan cuidarse y mejorar su salud. Una de las razones principales de que esto sea así es que se trata de un cereal muy saciante. Muchas personas optan por tomar avena en el desayuno con este objetivo ya que, de esta forma, se aseguran que no comerán mucho más hasta la hora de la comida. María Casas, dietista, entrenadora y profesora de la Academia Fit Generation, así lo confirma. “El efecto más inmediato, casi desde el primer día, es una mayor sensación de saciedad. Esto se debe a una de sus fibras más características, el betaglucano”.

¿Por qué se produce este efecto? “Al mezclarse con agua”, informa en detalle, “forma una especie de gel viscoso que ralentiza el vaciado gástrico, por lo que la avena permanece más tiempo en el estómago y tarda más en llegar al intestino”. Además, añade, “al ralentizar también la absorción de los carbohidratos, el betaglucano de la avena suaviza el pico de glucosa en sangre después de comer”. 

Así, según recogen los experto de la Federación Española de Nutrición en el informe Datos actuales sobre las propiedades nutricionales de la avena, “un consumo adecuado de avena en personas con diabetes ayuda en la disminución en la glucosa postprandial, mejorando la resistencia a la insulina”.

Por si fuera poco, ese mismo betaglucano sirve de alimento para las bacterias beneficiosas del colon por lo que es un alimento muy interesante para la microbiota. “Cuando lo fermentan, se producen ácidos grasos de cadena corta que, además de nutrir a las células intestinales, parecen participar en procesos que regulan el metabolismo y la inflamación”. 

Además, y a diferencia de otros cereales, la avena no solo aporta carbohidratos, sino que “su grano es rico en proteínas y en grasas, especialmente ácidos grasos insaturados”. 

Entre las propiedades de las proteínas están:

  • Aumentar la masa muscular.  
  • Contribuir a conservar la masa muscular
  • Contribuir al mantenimiento de los huesos en condiciones normales
  • Es necesaria para el crecimiento normal y el desarrollo del hueso en los niños.

La fibra de la avena

Otra de las razones del por qué es tan saciante es por su alto contenido en fibra. La avena puede ayudar a mejorar el tránsito intestinal.  Eso sí, este efecto no suele ser inmediato ya que se consigue con el consumo regular de avena. De hecho, como apunta la nutricionista, “si no estás acostumbrado a comer mucha fibra, es posible que al principio notes más gases o cambios en las heces”. Esto, comenta, “es una reacción común ya que la microbiota se está adaptando a una nueva fuente de alimento fermentable”.

Además, añade la experta, gracias al efecto de la fibra soluble y, en especial del betaglucano,  “cuando la avena se convierte en un alimento habitual, el cuerpo también empieza a modular sus niveles de colesterol”. 

Este efecto, recuerda, “no es inmediato, pero con el tiempo se vuelve significativo, especialmente en personas que parten de niveles elevados de colesterol”. De hecho, tal y como señala, en muchos estudios se han observado reducciones del colesterol total y del LDL de entre un 5 y un 15 %, dependiendo de la dosis y del tipo de avena consumida.

Lo mejor y más interesante es que “este efecto se consigue sin necesidad de hacer cambios drásticos en la dieta. Basta con incluir un par de raciones diarias de avena al día, preferiblemente entera o en forma de salvado”, para ver mejoras significativas.

Nutrientes de la avena

Por otro lado, la avena contiene además micronutrientes fundamentales para la salud como magnesio, zinc, hierro o silicio. “Son minerales que participan en cientos de procesos, desde la producción de energía hasta la regeneración celular o la defensa frente al estrés oxidativo”, señala la experta. 

El zinc,  por ejemplo, según señalan los expertos de la FEN, “contribuye, entre otras cosas,  a la síntesis normal de DNA, al equilibrio ácido-base normal, al metabolismo normal de los hidratos de carbono, a la función cognitiva normal y al metabolismo normal de los macronutrientes, al mantenimiento normal del cabello y de las uñas”. 

Por su parte, el magnesio, “ayuda a disminuir el cansancio y la fatiga, al equilibrio electrolítico. al metabolismo energético normal y al funcionamiento normal del sistema nervioso y de los músculos”. 

Qué pasa si tomas avena todos los días

En base a las propiedades nutricionales de la avena, es lógico pensar que tiene muchos beneficios para la salud pero ¿qué ocurre si la comemos a diario? Como explica Casas, entre los beneficios destacan que “se reduce el apetito, se modula la glucosa en sangre, se favorece el equilibrio de la microbiota y se regula mejor la absorción y eliminación de lípidos”.

Además y al mismo tiempo, “al comer avena todos los días introduces compuestos con efectos antioxidantes, antiinflamatorios y metabólicos que influyen, poco a poco, en cómo responde el organismo a lo que comemos”. Al margen de los beneficios que por sí sola aportan la avena, es importante recordar que “al consumir este cereal dejamos fuera del plato otros productos menos saludables, como el pan blanco”. Al optar por esta opción, por ejemplo, en el desayuno, se desplaza el consumo de este alimento que es bastante menos saludable que la avena, por lo que sus beneficios van más allá de sus propiedades nutricionales. 

De hecho, según explica la nutricionista, “cuando se sustituye una ración semanal de pan blanco por avena, el cuerpo deja de recibir almidones refinados que elevan rápidamente la glucosa en sangre”. A cambio, añade, “obtiene fibra soluble y carbohidratos de digestión lenta, que estabilizan el azúcar, modulan la absorción de lípidos y mejoran la respuesta glucémica”, concluye

Fuente: Mejor Salud