Ni 5 ni 15 metros, esta es la distancia a la que el humo del tabaco es menos dañino

El nuevo anteproyecto que modifica la Ley 28/2005, de medidas sanitarias frente al tabaquismo recoge, entre sus medidas, que está prohibido fumar a menos de 15 metros de distancia de colegios, parques infantiles o campos de fútbol, entre otros establecimientos. Te contamos si es suficiente o no. 

1. Joanna Guillén Valera

Tras años de negociaciones, el Gobierno ha dado luz verde a un nuevo anteproyecto que modifica la Ley 28/2005, de medidas sanitarias frente al tabaquismo. Entre las medidas aprobadas, la nueva la ley amplía los espacios donde está prohibido fumar e incorpora nuevos entornos de uso colectivo, tanto interiores como al aire libre, en línea con las recomendaciones de la Comisión Europea, entre ellos:

• Exteriores de centros sanitarios, educativos, universitarios y sociales. La distancia que marca la norma son 15 metros.
• Parques infantiles y zonas culturales o deportivas. Aquí también hay una distancia mínima para poder fumar: 15 metros. Nada de fumar tras la valla del parque o del campo deportivo. Y nunca en las gradas.
• Terrazas de bares, estaciones de transporte, espectáculos y conciertos al aire libre. Aquí se ven ampliados los espacios: en hostelería ya no se podrá fumar bajo ninguna circunstancia, tampoco en las paradas de autobús (15 metros de distancia) ni en las de tren (Metro o Cercanías) y se dice adiós al tabaco y todos los productos similares que la ley contempla en los festivales de música.
• Vehículos de transporte con conductor. Aquí la norma contempla cualquiera que se emplee para trabajar: los comerciales no podrán (deberían) fumar aunque fueran solos.

En todos ellos se estipula una distancia mínima de 15 metros pero ¿es suficiente? ¿qué medidas se han quedado atrás y son imprescindibles? En primer lugar, explica a CuídatePlus Alejandro Frino, neumólogo experto en tabaquismo y miembro de la Societat Catalana de Neumología (SOCAP), para que nos responda  desde la perspectiva sanitaria, es importante señalar que, aunque “es un paso en la dirección correcta es necesario avanzar más aún en prevención”. 

Esta medida señala, “no solo debe ser pensada en cuanto la existencia de tóxicos en el humo, sino también debe reducir el efecto «copia de conductas»”. Es decir, “cuanto más distancia libre de humo haya cerca de los jóvenes, menor es el fenómeno de aprendizaje por imitación”.

En cuanto a la distancia, el neumólogo recuerda que “no hay un consenso universal acerca de la “distancia mínima segura” en exteriores”. Eso sí, “la evidencia sugiere que la exposición disminuye con la distancia, pero puede seguir siendo detectable metros después ya que las condiciones meteorológicas y la configuración del espacio modifican mucho la dispersión”. Estas franjas de varios metros, valora, “son intentos pragmáticos para reducir la probabilidad de exposición pero no una garantía absoluta de ausencia de partículas ya que incluso 15 metros pueden resultar insuficientes si la cantidad de fumadores es alta”. Por tanto, recuerda, no hay una distancia mínima segura.

Medidas que faltan 

Sobre el resto de medidas adoptadas por el Gobierno, Frino recuerda que “no resultan suficientes, ya que todavía queda mucho por hacer ante las nuevas estrategias de marketing y los nuevos dispositivos (vapeadores y similares) presentados por la industria, que han sabido transformar estos productos novedosos en objetos del deseo, especialmente entre jóvenes, los nuevos y llamativos dispositivos, otorgando una falsa sensación de seguridad o menor daño”.  

Esta ley, señala, “no ataca el problema de la nicotina sintética que se muestra con mayor potencial adictivo, debido a su mayor coeficiente de transferencia al organismo (absorción muy veloz)”. 

En el caso de los calentadores de tabaco y otros, como informa el neumólogo, “tienen una carga impositiva baja, facilitando el acceso a los jóvenes que confían, equivocadamente, en que no les dañarán”. Por otro lado, la ley “no equipara valores con países de la Unión Europea que cobran bastante más del doble el paquete de cigarrillos, esto no solo fomenta el contrabando transfronterizo, sino que también facilita el inicio del consumo al no ser un producto costoso”. 

Para finalizar, la ley “tampoco contempla el empaquetado neutro, es decir que se mantiene todo el atractivo de diseños y colores que los expertos en marketing utilizan para captar la atención de los nuevos clientes”. En opinión del experto, “el empaquetado neutro es exitoso en otros países y debe ser extendido a todo producto relacionado con tabaco y nicotina”.

Cuándo notaremos los efectos en la salud

Estas son las medidas que comenzarán a implantarse ya pero ¿cuándo veremos los efectos en la salud? Tal como ocurrió con las leyes anteriores como las del 2005 y 2010, “se espera un beneficioso efecto en salud aunque no se comenzará a ver probablemente hasta dentro de 3-4 años. La buena noticia es que continuará causando efectos positivos más allá de ese período”, recuerda Frino.

Eso sí, según el experto en Neumología, “es factible que su efecto sea moderado o incluso pequeño, por las omisiones antes mencionadas”, lo que sí cree es que, “no provocará daños en la convivencia de los ciudadanos”.

fuente: Cuidate Plus