El déficit de hierro mantenido en el tiempo lleva a la anemia crónica, una enfermedad que, según datos de la Organización Mundial de la Salud a escala mundial afecta al 40% de los niños de 6 meses a 4 años, al 37% de las mujeres embarazadas y al 30% de las mujeres de 15 a 49 años. Estos son los signos de alerta.

uñas frágiles
  1. Joanna Guillén Valera

El hierro es fundamental para la salud y tener unos niveles de hierro óptimos es clave para nuestro día a día. Sin hierro “el organismo no funciona”, indica Marian García, doctora en Farmacia y más conocida como Boticaría García, en la campaña de concienciación #SinHierroNoFuncionas organizada por el Foro Español de Pacientes, con la colaboración de CSL Vifor, con motivo del Día Mundial del Déficit de Hierro. “El hierro es un mineral esencial para el cuerpo para el rendimiento físico y para el bienestar emocional, tener unos niveles óptimos de hierro hace que tengamos más energía”. 

¿Por qué se produce el déficit de hierro? Como informa Boticaria “aparece cuando lo que necesita tu cuerpo para funcionar supera el aporte natural de hierro”. Si se mantiene esta situación en el tiempo “puede ocurrir que produzcamos menos glóbulos rojos sanos y que aparezca una anemia crónica”. Estos glóbulos son los que se encargan de suministrar el oxígeno a los tejidos de ahí la importancia del hierro en nuestro organismo. 

Existen tres causas principales de la anemia:

  • Pérdida de sangre (hemorragia).
     
  • Falta de producción de glóbulos rojos.
     
  • Mayor velocidad de destrucción de los glóbulos rojos.

Según datos de la Organización Mundial de la Salud a escala mundial, se calcula que padecen anemia el 40% de los niños de 6 meses a 4 años, el 37% de las mujeres embarazadas y el 30% de las mujeres de 15 a 49 años. 

Síntomas de la falta de hierro

En cuanto a los síntomas de la falta de hierro, la experta destaca, sobre todo, la fatiga. “Una de las más comunes es la fatiga, que no el cansancio”, matiza. “El cansancio puede estar relacionado con tu estilo de vida, y suele mejorar con cambios simples como hacer ejercicio, comer mejor o dormir más, mientras que la fatiga hace que el paciente se sienta exhausto día tras día, sin razón aparente”, explica. Este tipo de cansancio deja a la persona “física y mentalmente agotada, incluso cuando no ha hecho nada especialmente extenuante” y esto debería alertarnos de que algo va mal.

 Además de la fatiga, hay otros síntomas que pueden ser indicativo de la falta hierro:

  • Grietas en la comisura de los labios
  • Úlceras en la boca
  • Moretones inexplicables
  • Palidez
  • Uñas frágiles 
  • Caída excesiva del cabello
  • Falta de energía
  • Irritabilidad
  • Dolores de cabeza
  • Dificultad para respirar o pérdida de memoria.

Ante estos síntomas, la recomendación general, sobre todo en los grupos más sensibles, es consultar con un profesional sanitario.

¿Qué se considera anemia?

La OMS define la anemia cuando la concentración de hemoglobina en sangre es inferior a 12 g/dl en mujeres y a 13 g/dl en hombres y también “cuando se observa un descenso brusco o gradual de 2 g/dl o más de la concentración habitual del paciente, aunque se mantenga dentro de los límites normales para su edad y sexo”, exponen desde la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia. 

Los niveles normales de hierro en suero sanguíneo oscilan entre 50 y 150 mg/dl. Pero también interesa conocer cómo se encuentra la ferritina, que es la principal proteína de almacenamiento de hierro y, en ausencia de inflamación o enfermedad hepática, una concentración baja indica carencia de hierro. Así, teniendo esto en cuenta y en términos generales, una concentración de ferritina en suero inferior a 10-12 microgramos/L es indicativa, en todas las edades, de una disminución de las reservas de hierro.

¿A quiénes afecta más el déficit de hierro?

El déficit de hierro afecta a casi la mitad de los pacientes con enfermedad renal crónica e insuficiencia cardíaca crónica. Y está, como señala Boticaria “está directamente relacionado con una peor calidad de vida, mayor riesgo de hospitalización e incluso muerte cardiovascular”. Otros pacientes en los que es especialmente importante el control del déficit de hierro son “aquellos pacientes con patología digestiva, pacientes quirúrgicos, oncológicos y mujeres embarazadas o con sangrado menstrual abundante”.