Se da en el marco de la suba de las cuotas y la dificultad de muchos de seguir pagando.La nueva propuesta consiste en telemedicina, cartilla más reducida y copagos.

Prepagas low cost: cuáles son los planes que ofrecen para no caer del sistema privado

Para los poco menos de 7 millones de afiliados a las prepagas no son semanas sencillas: entre diciembre y febrero, los aumentos de las cuotas llegarán al 70% y hasta el 80%. Para las compañías, el desafío es también importante: si quieren recomponer la ganancia que consideran lógica deben sostener la cartera de clientes, aun en este contexto de poder adquisitivo achicharrado. Acá, las propuestas más baratas de las principales entidades, algunas de las cuales se están animando al rótulo de los planes prepagos low cost.

La mayor novedad reciente para la medicina privada vino de la mano del decretazo del Presidente Javier Milei, quien desreguló (“por fin”, dicen con alivio en las empresas) los aumentos de cuotas hasta ahora fijados por el Gobierno. Sin embargo, esta libertad ansiada les está generando a las empresas un movimiento terrenal con sus ribetes.

Aunque cada compañía puede aumentar las cuotas a su gusto, hay conciencia de que los servicios ofrecidos, en algunos casos, no son sustancialmente distintos. La competencia puede volverse descarnada y por eso se apela a por lo menos dos estrategias.

Una consiste en establecer consensos corporativos de aumentos; un piso y un techo “lógicos” que alisen diferencias, lo que varias fuentes vienen definiendo como “salir de la regulación de un modo ordenado”.

Así, para enero, el sector pautó una suba de alrededor del 40% (sin contar el 40% extra que les recayó a los clientes que venían teniendo las alzas congeladas), mientras que para febrero se coordinó aumentar entre el 20% y el 30%.La experiencia de la telemedicina en la pandemia lleva a algunas empresas.La experiencia de la telemedicina en la pandemia lleva a algunas empresas.

La segunda estrategia viene de una necesidad, y se sobrentiende del silencio de algunas fuentes (Hospital Italiano, Cemic, Omint) y del pedido de disculpas por “no participar de la nota esta vez”, de parte de otros varios (Medicus, Galeno, Hospital Alemán…).

Aun cuando informar las propuestas de las entidades a modo de servicio pudiera resultarles una innegable forma de difusión, se ve que hay cierta incomodidad en desnudar la política comercial frente a la competencia.

Por suerte, la atención telefónica y las calculadoras de precios online, con sus suplicantes “cotizá tu plan”, están ahí, disponibles para cualquiera que, como esta cronista, desee averiguar qué tienen para ofrecer las prepagas hoy.

Prepagas y planes low cost

“La lógica del nuevo plan low cost es esta”, introdujo Fernando Coppolillo, gerente general de Medifé: “Primero ofrecimos planes con cartilla muy amplia y reintegro. Después, una cartilla amplia, pero con coseguros o copagos. Ahora sumamos una cartilla reducida y con coseguros. Esta lógica comercial implementamos hace dos semanas y la gente se está pasando”.

“El cliente entiende que es una smart choice (una decisión inteligente), ya que la persona joven usa principalmente la consulta ambulatoria y los descuentos en farmacia. Si alguna vez precisás cirugía o internación, algo que le ocurre a una por cada 1.000 personas por mes, estás cubierto a full. Es básicamente un seguro de internación”, precisó.La presencialidad en el nuevo formato económico es una de las variables que se empieza a resignar. Foto: Shutterstock.La presencialidad en el nuevo formato económico es una de las variables que se empieza a resignar. Foto: Shutterstock.

La propuesta más económica de esta entidad se basa en la atención por telemedicina, una tendencia que, por lo que se desprende de la ronda de consultas, marca el rumbo de la salud low cost, enfocada en reducir a casi cero el costo de mantenimiento de los consultorios y los traslados de la atención a domicilio. Si funcionó en la pandemia, ¿por qué no serviría en esta otra crisis?

Además, el paciente promedio hace ocho consultas por año, lo que los prestadores entienden como un sobreuso que hay que reducir. Las limitaciones que imponen los planes low cost buscan también desalentar la consulta “de más”.

“El plan Medifé+ tiene dos características. Una es ofrecer un sanatorio de excelencia en cada ciudad grande. En la ciudad de Buenos Aires es el Finochietto. En Córdoba, el Hospital Privado de Córdoba, por dar dos ejemplos. La parte ambulatoria, o sea, las consultas médicas y por guardia, son con los copagos que establece el nomenclador del Plan Médico Ambulatorio (PMO). Hoy es de 1.500 pesos. Y tenés cobertura plena en caso de internación”, contó Coppolillo.

En cuanto a los descuentos en farmacia, “son del 40%, pero la cobertura en odontología es básica, por PMO. Le agregamos telemedicina 24×7, tanto en guardia como en consultorios programados de telemedicina”.

No es menor enfatizar que hablamos de una propuesta económica en la que, para ver un médico en forma presencial habrá que ir exclusivamente al centro de salud en la ciudad de referencia. El resto será siempre por teleconsulta. ¿Cuánto cuesta?

A un adulto de 35 a 40 años, sin contar descuentos por aportes, “35.000 pesos por mes. En el siguiente segmento etario, va a subiendo de a 20%, a unos 42.000 pesos mensuales”.

Prepagas grandes y descuentos ad hoc

Las dos mayores prepagas del país, OSDE y Swiss Medical, informaron que están apelando a estrategias diversas para retener clientes con bolsillo complicado. En la primera explicaron (sin detalles numéricos) que están en vías de ofrecer “planes de contención no comercial, cerrados a los ya afiliados” que, aclararon, serán más baratos que el tradicional 210 (el plan más bajo de la entidad), y con copagos.

Enfatizaron que hay voluntad para “ayudar, a fin de amortiguar el aumento de la cuota”, pero remarcaron que dependen de los precios y aumentos de los medicamentos, de los prestadores y de los honorarios de los médicos.

En Swiss Medical pusieron “un equipo de colaboradores abocados a estar cerca de los clientes” y ofrecerles distintas propuestas, en el contexto de “subas de precios tan grandes, aunque extremadamente necesarias”.

Buscan mantener dentro de la compañía a los clientes financieramente complicados, con la expectativa de que, si las cosas mejoran, retornen a sus planes originales. Sin dar cifras, hablaron de “planes con alternativas de servicios que pueden adaptarse a diferentes niveles de precios”.

Según pudo averiguar Clarín, las entidades más grandes están contendiendo a los afiliados en base a los perfiles y necesidades particulares. Es algo que toda entidad relojea con detalle: no es lo mismo un cliente que paga $60.000, pero representa un gasto de $2 millones mensuales que uno que casi no usa el sistema. Unos, podría decirse, “bancan” a los otros y debe haber un equilibrio.

Por lo pronto y para orientarse, se consultó a OSDE la cuota actualizada del plan 210 a febrero (ya tiene el 40% de aumento de enero y el 28% de febrero).

En formato individual y directo (sin derivación de aportes), una persona de 36 a 64 años pagará $174.588. Un matrimonio en ese rango etario, $290.492. Si tienen un hijo, suman $55.394. Y un segundo hijo, $34.568. El plan no tiene copagos y la diferencia sustancial con los planes superiores de OSDE es la cartilla más acotada.

Estos montos bajan bastante cuando se derivan aportes, no solo por la derivación en sí sino porque al plan se le reduce un 10,5% en concepto de IVA.

Las propuestas de otras prepagas

Si uno pide información al call center del CEMIC dirán que los planes más baratos son dos, pero aún no tienen los precios de febrero. El primer plan que comparten es el “Gris”, también llamado 709: «Tiene todo cubierto en internación, sin límite, con habitación individual en los centros contratados (los propios de la entidad y, en Capital, el Hospital Británico y el Santa Isabel). No tiene copagos salvo en atención a domicilio ($1.500) y aplica un 40% de descuento en farmacia”.

Para una persona de 45 años, la tarifa (a enero) era de $61.496. Para una pareja en sus cuarentas con dos hijos de 10 y 12 años, a $184.850.

La otra opción (plan “Azul”, o 409) tiene copagos. El médico a domicilio, $5.500; consultas médicas, guardia u odontología, $2.200. Para una persona de 45 años, $52.253, en enero. Para la familia de cuatro, $157.062.

El plan más bajo de Galeno (220) online tiene montos parecidos a los anteriores, siempre que uno derive aportes por ingresos de $500.000 brutos por adulto. En ese caso, para una persona, cuesta $52.373. Si es una pareja con dos hijos adolescentes (y entre los adultos tienen ingresos por cerca de $1 millón), $178.975. En los centros propios no se cobran copagos, salvo para consultas a domicilio, por $4.800.

La salud, con nuevos formatos en el horizonte

Las obras sociales y las prepagas están regidas por determinadas leyes que en estos días intenta modificar el Gobierno. Existen otros formatos de entidades de salud que prometen proliferar, como las que brindan lo que en el sector llaman “planes parciales”, que no tienen las mismas obligaciones ni, desde ya, las mismas cualidades. Pero tampoco cuestan desde cinco cifras.

Una de las contras es que estas empresas no pueden recibir aportes por ingresos. Sin embargo, al ser propuestas de cobertura parciales, resultan económicas y en ese sentido pueden ser convenientes, si lo que se busca es complementar, por ejemplo, el servicio “a medias” de la obra social de turno o el hospital público.

En la empresa Emergencias explicaron que ofrecen planes parciales, extrahospitalarios; es decir, todo lo que sea “pre” y “post” hospital, pero no la internación, en ninguna de sus formas. Ofrecen descuentos en farmacias, médico a domicilio, telemedicina, consultas por cartilla en consultorios propios y hacen descuentos para estudios.

Pueden, además, hacer traslados entre instituciones para el alta o el ingreso a una institución. Pero, hay que remarcarlo, a través de estas compañías uno no se opera ni queda internado con cobertura. Para eso, dicen ellos, «conviene tener la obra social, y en este sentido la propuesta funciona como complemento«.

¿Cuánto cuestan algunos de los planes? Varían bastante en base a cuántos de los siguientes ítems tienen copago, entre traslados, consultas médicas, a domicilio y sesiones de psicología, kinesiología y fonoaudiología, pero rondan entre $7.200 a $22.000. Eso sin contar una propuesta realmente módica, de $3.250. ¿Qué incluye? Solo dos cosas: descuentos en farmacia y, claro, consultas en formato de telemedicina.

Fuente: https://www.clarin.com/sociedad/prepagas-low-cost-planes-ofrecen-caer-sistema-privado_0_GjjiMiZcZX.html