¿Por qué los hombres mueren antes que las mujeres?

Es algo que se sabe desde hace tiempo, pero sigue siendo chocante. La brecha entre la esperanza de vida de hombres y mujeres es bastabte grande. ¿A qué se debe? Un experto de la Universidad de Harvard expone las posibles explicaciones.

Es sabido que la esperanza de vida de los hombres y las mujeres es muy diferente. Casi todo el mundo lo puede apreciar en su entorno más cercano y hay múltiples muestras de ello. Por ejemplo, ellas son mayoría en las residencias de ancianos. Las estadísticas oficiales confirman que los hombres mueren antes: según los últimos datos disponibles, en 2022 la esperanza de vida al nacer en España fue de 80,3 años en hombres y 85,8 en mujeres.
En todo el planeta se aprecian diferencias sustanciales en la salud de mujeres y hombres y en los últimos 30 años se ha avanzado poco en la reducción de esta brecha, según un estudio publicado el año pasado en The Lancet Public Health. No obstante, ninguno de los dos sexos sale bien parado. Las mujeres viven más tiempo, pero viven más años con mala salud. Por su parte, los hombres experimentan una carga superior y creciente de enfermedades con consecuencias mortales.
8 posibles explicaciones
¿A qué se debe esta persistente divergencia en la esperanza de vida en hombres y mujeres? No hay una única explicación, pero sí varias posibles causas que, en conjunto, ofrecen una aproximación bastante certera. Estas son las más relevantes, según Robert H. Shmerling, especialista en reumatología de la Escuela de Medicina de Harvard (Estados Unidos):
- Razones biológicas. Se ha constatado que el cromosoma Y, que solo está presente en los hombres, tiende a desarrollar más mutaciones que el X. Además, mientras que las mujeres tienen 2 cromosomas X (XX), los varones solo tienen uno (XY), lo que lleva a que las alteraciones patológicas ligadas al cromosoma X no puedan ser compensadas por una segunda copia sana o normal. Por otro lado, los trastornos del desarrollo son más comunes en los chicos, lo que en muchos casos se traduce en un acortamiento de la esperanza de vida ya desde los primeros años de vida.
- Mayor mortalidad por enfermedad cardiovascular y a una edad más temprana. Los hombres tienen una probabilidad hasta un 50% superior de morir por enfermedades del corazón. Nuevamente, las causas de esta divergencia son múltiples y la mayor presencia de hormonas femeninas (estrógenos) en las mujeres es solo una parte de la explicación. También pueden influir factores como un peor control de la hipertensión arterial o de los niveles de colesterol.
- Los hombres asumen más riesgos. Esta tendencia puede tener un sustrato tanto cultural y social como biológico. Al parecer, la parte del cerebro que controla el razonamiento y la planificación de la acción, el lóbulo frontal, se desarrolla más despacio en los niños y los hombres jóvenes que en las chicas y las niñas. Este hecho podría contribuir a aumentar la mortalidad por accidente durante la infancia y la juventud, así como a la mayor tendencia a fumar o beber alcohol en exceso.
- Los hombres tienen trabajos más peligrosos. Las ocupaciones que entrañan más riesgo para la vida -militar, bombero, obrero de la construcción, etc.- siguen estando cubiertas de forma mayoritaria por hombres.
- La altura y el tamaño pueden influir en la mortalidad. Este factor no está del todo claro, pero se ha observado en diferentes especies animales -incluidos los humanos- que los que son que son más grandes suelen morir antes que los más pequeños.
- Los hombres se suicidan más. En España, la cifra de suicidios ascendió en 2022 a 3.126 hombres y 1.101 mujeres. Aunque enfermedades mentales como la depresión son más prevalentes en las mujeres, lo cierto es que los hombres se quitan la vida con mayor frecuencia. Puede ser porque las mujeres piden más ayuda.
- Los hombres están menos conectados socialmente. Por causas que todavía no se han esclarecido totalmente, las personas con menos relaciones sociales, o que son más débiles, tienden a tener mayores tasas de mortalidad prematura.
- Menos visitas al médico. Según diferentes estudios, los hombres acuden a las consultas y revisiones médicas con menor asiduidad que las mujeres.