Las señales que pueden indicar el deterioro cognitivo u otras enfermedades neurodegenerativas.

Los olvidos y lagunas mentales son uno de los signos más frecuentes del envejecimiento y también una de las señales que merecen la atención de familiares y acompañantes.

Aunque, más allá de la alarma, es importante tener en cuenta ciertos signos.

El primer punto que aclara una información de la Asociación Americana de Psicología es que determinadas omisiones -como extraviar las llaves o no recordar una dirección- pueden presentarse a partir de los 65 años y no siempre obedecen a una condición neurológica, como el Alzheimer.

Estas situaciones muchas están relacionadas con condiciones físicas y psicológicas. Entre ellas, la nota del sitio español Semana, enumera las siguientes:

– Ansiedad

– Deshidratación

– Depresión

– Infecciones

– Efectos secundarios de ciertos tipos de medicación

– Una nutrición muy pobre

– Estrés psicológico

– Abuso de sustancias

– Desequilibrios en la glándula tiroidea.

Muchos estudios demostraron que el cerebro es capaz de aprender a lo largo de la vida. Con los años, algunas habilidades cognitivas continúan mejorando y otras disminuyen.

De todas maneras, ante olvidos repetidos o muy marcados, la recomendación es acudir a un médico de confianza para hacer una revisión completa y además, a un psicólogo para una evaluación neuropsicológica.

Un ejemplo: la memoria semántica -aquella relacionada con recordar conceptos y hechos generales- sigue mejorando. Pero otros hechos, como qué uno tiene que hacer, disminuyen.

El National Institute on Aging recalca que la alarma deberá encenderse cuando los olvidos dificultan la cotidianeidad. Lo cual se presenta en un primer momento como la dificultad de seguir instrucciones, desconocer lugares o personas cercanas.

El envejecimiento normal, además, no conduce a una pérdida drástica de la memoria.

Consejos para mejorar la memoria

Las recomendaciones de la Asociación Americana de Psicología son los siguientes.

– Participar en actividades sociales.

– Realizar actividades físicas.

– Seguir una alimentación con abundantes vegetales.

– Darle importancia al descanso.

Fuente: https://www.clarin.com/internacional/envejecimiento-primeros-olvidos-alarmarse_0_stnn0By9Z3.html